Aseguradoras y peritajes
El uso de drones en el sector de los seguros aporta numerosos beneficios. En primer lugar, reducen los riesgos personales al permitir inspecciones en áreas peligrosas como grandes siniestros, catástrofes o estructuras inestables. Los drones acceden a zonas de difícil alcance sin poner en peligro al personal de trabajo.
Además, agilizan el proceso de peritación al ponerse en marcha rápidamente y obtener información de calidad en poco tiempo. Esto se traduce en ahorro de tiempo y recursos, ya que se reducen los desplazamientos necesarios.
El acceso a imágenes de alta resolución a través de los drones es más económico que otras alternativas como plataformas elevadoras o grúas. Esto permite la recepción de imágenes en tiempo real y la generación de informes completos y detallados para una mejor tasación de los daños.
La reducción de costes operativos para las aseguradoras puede tener un impacto positivo en las primas de sus clientes como beneficio adicional.
Además, el uso de drones facilita el seguimiento en la prevención de fraudes. Estos dispositivos, cada vez más ligeros y silenciosos, permiten un monitoreo discreto y detallado, lo que ayuda a identificar posibles casos de fraude en los siniestros.
En qué áreas se implementa este servicio:
Seguros agrícolas: para evaluación de daños en cultivos tras fenómenos adversos (inundaciones, incendios, plagas). Estimación de superficie afectada por incidencias de tipo climático y/o medioambiental.
Seguros de hogar: para la inspección de daños en edificaciones cuando el acceso es complicado o conlleva riesgo para las personas (por ejemplo tras incendios); valoración de riesgos previos: comprobar el inmueble antes de ofrecer una póliza para evaluar de manera rápida y global posibles puntos críticos.
Investigación de accidentes: derrumbes, origen de incendios; reconstrucción de accidentes de tráfico (sobre todo si son accidentes graves o múltiples); accidentes de difícil acceso (barrancos o montañas)
